El siguiente video es un ejemplo maravilloso de la magnitud de la conciencia animal. Es también evidencia irrefutable de que el conductismo (corriente sicológica basada en que todo estimulo tiene una respuesta predeterminada y predecible) NO es una teoría aceptable para explicar el comportamiento de los animales, incluyendo los humanos. Además, el video demuestra que la actividad cognitiva no es exclusiva de la especie humana, y puede prevalecer en otros mamíferos.
En el video se aprecia por primera vez el parto de un elefante asiático en el Elefant Safari Park en Indonesia. Después de una larga espera y un parto calmado, el bebe elefante finalmente emerge de la hembra, quien se aparta cuidadosamente del recién nacido para no causarle ningún daño. Cuando el bebe no responde al cambio de ambiente y no respira por más de dos minutos, la madre demuestra su ansiedad con sonidos agudos, y rápidamente empieza el proceso de resucitación. Como explica el narrador del video, los movimientos de la madre son el equivalente a las palmadas en la cola que les dan a los humanos al nacer. Al ver que estos son inefectivos, la hembra trata de levantar la cabeza del bebe elefante con la trompa, y esta estrategia funciona inmediatamente. Al instante se puede apreciar la calma de la hembra, quien continua monitoreando al recién nacido mientras este infla sus pulmones con aire. Los primeros minutos en la vida del bebe elefante son los más importantes, y mientras el bebe logre pararse, estará a salvo. Al final, la mamá elefante parece tener una sonrisa en la cara mientras camina al lado de su bebe: no todos los días se siente la satisfacción de resucitar su recién nacido!